Cuatro llamas, cuatro mundos: un cuarteto de sonidos que arde por dentro

 Cuatro llamas, cuatro mundos: un cuarteto de sonidos que arde por dentro

Un viaje breve y fulminante por cuatro canciones que encienden emociones distintas, desde el synthpop luminoso hasta el rock más indomable y la rebeldía que late bajo la piel.

“The Countdown” – dB Smith

“The Countdown” de dB Smith se enciende como un pequeño reloj luminoso en medio del synthpop actual, marcando cada segundo con un pulso que combina suavidad y energía sin pelear por protagonismo. La canción respira esa estética ochentera y noventera que se reconoce al instante, pero la envuelve con un toque moderno que la vuelve fresca, casi hipnótica. Las guitarras etéreas trazan líneas que parecen flotar sobre un colchón electrónico pulcro, mientras la voz femenina guía el recorrido con una mezcla de calma y sutileza que prepara el terreno para un estribillo contagioso, de esos que se quedan orbitando en la mente sin pedir permiso.

Cuando llega el breakdown, el tema se abre como una ventana repentina que deja entrar más luz, aportando un giro energético que sostiene la tensión justa. dB Smith y Danke consolidan aquí una colaboración que entiende el equilibrio entre nostalgia y novedad, creando un pop alternativo elegante, amable y lleno de encanto sonoro.

“Death Anxiety” – The Absent

“Death Anxiety” de The Absent irrumpe como un desgarro eléctrico que mezcla metalcore, deathcore y un eco inconfundible del nu-metal que los moldeó. Aunque el track nació meses atrás, su reactivación se siente como un renacimiento furioso: un regreso desde las sombras para reclamar su propio espacio. La guitarra de Jason Catlett ruge con ese filo áspero que recuerda viejas cicatrices del género, mientras el bajo de Ryan Davis y la batería de Aaron Schauf sostienen un terreno sísmico donde cada golpe parece abrir grietas nuevas.

Jay Pigmann entrega una interpretación que alterna entre un grito que quema y fragmentos melódicos cargados de vulnerabilidad, creando un contraste que potencia el tema central: ese miedo existencial que se vuelve compañero silencioso. La banda transforma la ansiedad en un estallido catártico, un choque entre rabia y reflexión que no busca consuelo, sino desahogo.

The Absent demuestra aquí que su sonido, aunque familiar, respira presente, riesgo y una identidad ferozmente propia.

“Smoking” – Full Flower Moon Band Feat. Drunk Mums

“Smoking” llega como una llamarada desobediente en la que Full Flower Moon Band y Drunk Mums se encuentran para encender un himno sucio, urgente y deliciosamente caótico. El ADN del post-grunge y el garage rock se mezcla aquí con una energía que parece escaparse de un bar repleto donde el sudor, el humo y las guitarras retumban sin pedir permiso. La voz de Kate “Babyshakes” Dillon atraviesa el track con esa fiereza magnética que la ha convertido en figura de culto, mientras la colaboración con Drunk Mums añade un filo aún más descarado y callejero.

La canción respira exceso, adrenalina y camaradería ruidosa, como un choque frontal entre riffs afilados y un ritmo que no deja espacio para el respiro. “Smoking” funciona como declaración de espíritu incendiario: un recordatorio de por qué la banda está conquistando escenarios de Europa y llamando la atención de gigantes del rock. Es una descarga directa al sistema nervioso, hecha para escucharse fuerte y sin moderación.

“Something More” – BRUDES

“Something More” de BRUDES irrumpe con la potencia de un latido subterráneo que se niega a aceptar lo impuesto. Desde el primer verso, la canción arde con una mezcla punzante de punk, indie rock y alternative rock, construyendo un manifiesto sonoro contra la asimilación forzada y el desprecio hacia los cuerpos y mentes marginadas. La letra golpea con ironía afilada y una rabia lúcida, retratando caricaturas del poder, del miedo y del conformismo que intoxica lo cotidiano.

La banda desata guitarras tensas, un bajo que se arrastra como protesta silenciosa y una batería que avanza con el pulso de quienes no están dispuestos a bajar la mirada. El estribillo “Holding out for something more” se convierte en una consigna, un pequeño estandarte para quienes insisten en vivir fuera de los moldes que otros intentan imponer.

BRUDES entrega aquí un tema que no solo confronta: convoca. Una bofetada al odio, una invitación a resistir y a reclamar un espacio propio en un mundo que intenta uniformarlo todo.

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Redaccion LC

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